pelotazo

Los Carriles es un mastodonte salido de la cultura del pelotazo. 
Nacido aburbujado con el PSOE en tiempos de locura inmobiliaria, el PP lo retomó cometiendo una antisocial ilegalidad a través de su mayoría absoluta: en 2012 forzó una reducción de viviendas de protección, pasándolas del 50% al 30% de la edificabilidad residencial. Y una reducción para zonas verdes o equipamientos (véase colegios o centros de salud) de 70 a 55 m2 por cada 100m2 edificables. Todo lo contrario a “los poderes públicos regularán la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulaciónque reza el artículo 47 de la Constitución, por mucho que en su nota de prensa el gobierno municipal hablase de “dignificar el ambiente urbano”.

En 2014 el Tribunal Superior de Justicia de Madrid tumbó esa modificación que, en plena crisis para tantos vecinos necesitados de vivienda y respaldo público, únicamente favorecía al margen de beneficio de los promotores inmobiliarios.


¿Se pidieron disculpas? No, se cambió el discurso por lo ventajoso que era un mayor porcentaje de vivienda protegida, con todo el descaro de un trilero. Como cuando vende como medida verde la ‘reducción de altura en la proximidad del monte de Valdelatas’ cuando lo que ocurre es que ahí irán los chalets de lujo con mejores vistas. No es casualidad que el Plan Parcial presentado por los propietarios privados fuese aprobado por su Junta de Gobierno tan sólo unos días antes de las elecciones municipales de 2015, incluidas dentro de la investigación por la financiación irregular del PP. 

Si ya es demoledora la promoción de pisos de 500.000-600.000€ en El Juncal para los hijos de la Moraleja (granero de votos que amplía con su extensión en La Carrascosa), este descarrile inmobiliario, de hasta 8.600 viviendas y 2,2 millones de m2 (un 5% de la superficie total de Alcobendas) pone en juego nuestro futuro. Empezando por hipotecas a más de 30 años para aquellos vecinos de ingresos más altos que puedan plantearse acceder y que no son la mayoría de los jóvenes, clase trabajadora de nuestros barrios o pensionistas con bajos ingresos. Además, bajo el auspicio privado la vivienda más barata se haría en último lugar (en primer lugar se construirían las unifamiliares de mayor precio), por lo que habría que esperar otra década, consolidando la deuda social por la que miles de vecinas siguen esperando un hogar asequible y a quienes postergan una y otra vez.
O sea, recalificar suelo rústico a favor del caciquismo y lucro privado, en vez de como agente social que recupere los suelos para el bien de la mayoría social. No podemos ceder a sus pretensiones a cambio de migajas, hay proyectos vitales en juego y el patrimonio de las generaciones venideras.


El gobierno municipal vuelve a mentir cuando dice que “es el único suelo donde construir vivienda”. Sin salir de la ciudad ya habitada hay 40.000 m2 desaprovechados en parcelas dotacionales, en Casablanca y Espino del Cuquillo, que permitiría levantar hasta 1500 viviendas de alquiler asequible, al ser suelo público, manteniendo en el proyecto el parque o centro de día para el que se reservaron. Una alternativa donde la plusvalía revierte en la colectividad y evita la elitización de los barrios. Una alternativa donde la vivienda pública no se vende, se disfruta, como patrimonio de futuro para todas.
Y con un plan decidido, en esta legislatura podrían recuperarse al menos 500 viviendas ya construidas pero vacías -mucha en manos de la banca- para ser gestionadas en la bolsa de alquiler. Esa sería una medida más ecológica que camuflar los destrozos añadiendo unas líneas de parque al proyecto.

Los Carriles pese a ser un proyecto estratégico y de largo plazo no se ha abierto a una participación ciudadana amplia, lo que nos da idea de lo alejado que está este proyecto de los intereses del pueblo. Como es sabido, la opacidad de los despachos genera corrupción y 2/3 del proyecto siguen sin estar si quiera justificados, amén de qué infraestructura va a soportarlo.
¿Podemos permitirnos malgastar el cada vez más escaso suelo, orientándolo a la especulación y al colapso? Si estás de acuerdo en primar las necesidades de la mayoría social, no te abstengas de manifestarlo este Lunes 27 a mediodía frente al Ayuntamiento de Alcobendas. Nosotras preferimos disfrutar de la salud del monte de Valdelatas antes que dejarles destrozarlo a base de maletines.